Economía de comunión EDC

La Economía de Comunión nace en el seno del Movimiento de los Focolares. En el año 1991, Chiara Lubich, su fundadora, contemplando la pobreza en la que vivían muchos de los miembros del Movimiento en los países del Tercer Mundo, comprendió que sólo con las ayudas económicas que recibían no podrían salir de aquella situación. Propuso entonces la creación de empresas dirigidas por personas competentes, que fueran eficientes y que tuviesen beneficios, una parte de los cuales, un tercio, debería destinarse a los pobres, para ayudar a cubrir sus necesidades básicas y para crear puestos de trabajo que les permitiesen salir de aquella situación. Otra  tercera parte a la formación de las personas en esta nueva cultura económica.Se trata de un modelo económico que se inspira en la Doctrina Social de la Iglesia y en el carisma propio del Movimiento que es el de la Unidad y el Amor recíproco. Es un modo de pensar y actuar en el ámbito económico y empresarial que busca ser conforme a una visión cristiana del hombre y de la vida, en la cual la empresa está al servicio de la persona y en función de ésta.Esta concepción empresarial puede ser la respuesta a algunos de los problemas que hoy tienen los empresarios, ya que muchos de ellos como son la productividad, la calidad, la competitividad, etc., dependen de la motivación y de la implicación de las personas. También, ante los nuevos retos que nos plantea la globalización, creemos que una empresa más humanizada y más cohesionada internamente se encuentra en mejores condiciones de hacer frente a los mismos.